Guía para padres.

Si tu hijo/a es acosado/a. 

DETECCIÓN

La observación por parte de la famila es esencial para la detección de una situación de acoso. Es muy importante estar alerta de los cambios en el comportamiento del niño o la niña, ya que nos pueden dar pistas muy valiosas sobre su situación. Si descubrimos algún síntoma de que nuestro/a hijo/a está siendo acosado/a, no debemos minimizar la situación, aconsejarle que se enfrente a sus acosadores o pensar que eso son tonterías, que siempre ha sucedido y no pasa nada.  Veamos algunos indicios de que se está produciendo una situación de acoso.
  • Trastornos de conducta. Si de repente se muestra irritable, triste, llora sin dar explicaciones del motivo, se encierra en su habitación, está distraído/a, absorto/a en sus pensamientos, tenemos una pista de que su estado emocional y social no pasa por un buen momento.
  • No quiere ir al colegio. Suele tener dolencias psicosomáticas, la necesidad de evitar el colegio se transforma en dolor de estómago, mareos o vómitos. Si notamos que tiene miedo de ir al colegio o busca excusas para no ir, podemos estar ante una situación de acoso escolar.
  • Otro indicativo es que el niño o niña no haga vida social, que no se relacione con otros niños, que no quiera ir a excursiones con el colegio, que no salga a jugar con otros niños, que no tenga amigos o que no quiera ir a fiestas de cumpleaños.
  • Miente cuando se le pregunta por qué no hace trabajos en grupo con sus compañeros, por qué no quiere ir al colegio o a excursiones, qué hace en el colegio, con quién juega... La víctima de acoso tiende a sentirse avergonzada por su situación y evita cualquier declaración sobre el tema.
  • También son habituales los trastornos del sueño, pesadillas, orinarse en la cama o la falta de apetito. En el caso de los trastornos alimentarios debemos tener especial precaución, pues pueden derivar en enfermedades como la anorexia o la bulimia.
ACTUACIÓN

  • Si nuestro/a hijo/a es acosado en la escuela, lo primero que tenemos que hacer es hablar con él y comprometernos a ayudarle a resolverlo. No le debemos hacer sentir culpable de la situación.
  • Para investigar lo que está ocurriendo, debemos escucharle y no interrumpirle, dejar que se desahogue. Se sentirá apoyado.
  • También debemos ponernos en contacto con su profesor/a para informarle de lo que está pasando y pedirle ayuda con la solución del conflicto.
  • En ningún caso debemos estimular a nuestro/ hijo/a para que se vengue o se muestre agresivo con su/s acosador/es. Podría ser peor.
  • Podemos discutir alternativas asertivas para responder a/a los acosador/es.

Si tu hijo/a es acosador/a.

PREVENCIÓN

Educar en valores 
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Los valores son aquellos modelos de conducta y actitudes que toda persona debe tener para convivir en sociedad. Es aquello que la familia, la sociedad y la persona como individuo, consideran como correcto.
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Empatía
La empatía es la capacidad para entender las preocupaciones y problemas de los demás, hace que las personas sean sensibles, tolerantes, comprensivas, afectuosas y pacíficas. Los niños deben entender sus propios sentimientos y saber que los demás también tienen sentimientos, necesidades o preocupaciones igual que él. Para inculcarles este valor lo primero que hay que hacer es escucharle de verdad, sin menospreciar sus sentimientos. Muchas veces cuando los niños se ven comprendidos por sus padres se sienten mucho mejor. 
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Autocontrol
El autocontrol es lo que permite tomar decisiones correctas en situaciones tentadoras, significa tener control de sí mismo. El autocontrol es lo que permite a los niños a regular su conducta de forma que sólo realicen las cosas que son correctas. Es una virtud muy necesaria en la sociedad actual tan cargada de violencia. Si tu hijo es de los que pierden el control y acaban con gritos, palabrotas y patadas, es bueno enseñarle a respirar profundamente y contar hasta diez para relajarse. Poco a poco irá aprendiendo que una vez que se actúa ya no hay marcha atrás y se que entonces se debe asumir el resultado de los actos. Hay que enseñarles a pensar antes de actuar imaginando las posibles consecuencias. 
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Respeto
Es tratar a los demás como nos gustaría que ellos nos tratasen a nosotros. La educación en el respeto empieza en casa, cuando la manera de dirigirnos entre nosotros es correcta, cuando mantenemos una actitud cordial y respetuosa con los hijos, estamos inculcando este importante valor en ellos.
Debes mostrar respecto por tus hijos aceptando sus opiniones, sus deseos y sus gustos, y haciéndoles partícipe de los asuntos de casa, pero eso tampoco significa que se les deban otorgar todos los caprichos. Todos los niños viven la etapa de las palabrotas, hay que hacerles entender que esas palabras malsonantes pueden herir o molestar a los demás y que lo mismo sucede con las peleas.
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Sinceridad
La sinceridad es la base de la confianza. Debemos enseñar a lo los hijos que no hay que mentir pues haciéndolo se contrae consecuencias desagradables como la falta de confianza, enemistad y enfados. Mintiendo no se solucionan los problemas. Los niños a veces mienten porque tienen miedo al castigo por haber hecho algo, para evitar la recriminación, con lo que no se debe abusar de los castigos. 
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No violencia
Debemos pues enseñar a los hijos a controlar la agresividad. Para enseñar valores pacíficos a los niños lo primero que hay que hacer es no pegarles (los niños actúan y aprenden los valores que ven en el seno familiar), controlar su entorno (televisión, videojuegos, Internet, amistades…) para evitar las imágenes o situaciones cargadas de violencia. Se debe frenar en seco los comportamientos violentos y explicar, en un lenguaje sencillo, la situación y su consecuencia.
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Colaboración
Todos los niños pequeños pasan la etapa de querer ayudar en casa y aunque su ayuda resulte el doble de trabajo para nosotros, es importante permitirles que nos brinden su ayuda. De hecho deben tener la obligación de realizar tareas en casa (adaptadas a cada edad), aunque sean pocas y sencillas. Así aprenderán a colaborar, a realizar trabajos en equipo, a integrarse y a valorar los esfuerzos. 
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Modales
Los niños tienen que ir aprendiendo los buenos modales poco a poco y una vez más hay que predicar con el ejemplo, si le pedimos las cosas a nuestro hijo con un “por favor” y luego le damos las “gracias” como algo normal y habitual, él también acabará haciéndolo. Es importante ir inculcando normas básicas de conducta como por ejemplo saludar, comer correctamente con los cubiertos, decir “buenos días” o no interrumpir las conversaciones.
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Consideración
Ser considerado significa tener la capacidad de renunciar, en beneficio de los demás, de tus propios intereses. Preocuparse primero por otros antes de mirar por nosotros mismos. Una forma de guiar y corregir la conducta en determinadas situaciones es proponiendo una acción alternativa; en el caso del ejemplo del ruido por la noche sería indicar al niño un juego más silencioso que no pueda molestar a los vecinos.
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Tolerancia
Es respetar a los demás por su carácter y comportamiento, aceptando sus diferencias y reconociendo sus derechos y necesidades. Hay que ayudar a nuestros hijos a descubrir las cualidades positivas de las personas y enseñarles desde pequeños, que ninguna persona es mejor que otra. Dialogando, explicando y mostrando abiertamente diferencias y similitudes hará que nuestros hijos se sientan más seguros y sean tolerantes.
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Civismo
Tener este valor significa que eres capaz de mirar a tu alrededor y acudir en ayuda de quien lo necesita, de quien está en apuros. Y es una virtud que denota seguridad y confianza en uno mismo, así como integridad moral.


DETECCIÓN
Los padres tienden a aceptar mejor el hecho de que sus hijos/as sean los acosados que los acosadores. La tendencia en estos casos es escudarse en que son cosas de niños, que su hijo/a es un poco agresivo, pero no tanto, y otras explicaciones para confiar en que sus hijos/as no están maltratando a otro/a niño/a.

Por otro lado, muchos padres están más pendientes del rendimiento académico de sus hijos/as que de su desarrollo como personas. Si el/la niño/a saca buenas notas, va contento al colegio y, en definitiva, es más o menos buen estudiante, los padres se sienten satisfechos. No hay que olvidar que, como padres, tenemos la obligación de enseñarles una serie de valores de convivencia y respeto. Cuando no ponemos atención a educar en esos valores, nuestros/as hijos/as pueden convertirse en acosadores, o los "matones" del colegio.


Algunas pistas que nos pueden hacer sospechar que nuestro hijo es un acosador pueden ser:
  • Falta de empatía. Al niño o niña no le preocupan los sentimientos de los demás, sólo los suyos y sus necesidades.
  • Muestra una actitud dominante y prepotente con niños de su círculo social cercano (hermanos o amigos).
  • Se comporta de manera agresiva y está orgulloso de ello.
  • Habla de manera despectiva de un compañero y se burla.
  • No cumple las normas de la casa, no asume la responsabilidad de su comportamiento, nunca pide perdón si ha hecho mal.
ACTUACIÓN

Si nuestro hijo o hija es un agresor/a escolar, tened en cuenta que es una situación que se puede solucionar, pero hay que actuar. Los primeros pasos de actuación:
• Por sí mismo/a, el/la niño/ no va a hablar sobre la situación, ya que no siente responsabilidad ni que eso esté mal. Puede que ni siquiera sea consciente de que es un agresor o acosador. Hay que hablar con él, preguntarle directamente y de manera clara. 
• Si la información ha venido del colegio por el centro escolar de una conducta de acoso por parte de vuestro hijo o hija hablad con él o ella, invitadle a sugeridle que se ponga en el lugar de la víctima. Hablad del problema del que os han informado, expresadle que este tipo de comportamiento no es tolerable.
• Hacedle saber que este tipo de conducta tendrá una sanción inmediata por vuestra parte.
• Buscad ayuda de los/las profesionales que sean necesarios para ayudarle.




Para saber más: 
Detección: http://www.clubmadres.com/psicologia/bullying-acoso-escolar-como-saber-si-mi-hijo-es-victima-o-acosador/
Prevención: http://www.clubmadres.com/psicologia/bullying-como-prevenir-el-acoso-escolar/









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